El regulador piloto se utiliza cuando se requiere una precisión elevada en el mantenimiento de la presión fijada al variar las condiciones operativas.
Está especialmente indicado:
Como regulador de precisión para capacidades < 100 Nl/m˙
Como piloto en general (típicamente para reguladores de gran tamaño véase REG 400).
La elevada precisión de funcionamiento y la baja histéresis del sistema están determinadas por la casi total ausencia de rozamientos.
La presencia de una ligera fuga de aire es necesaria para el buen funcionamiento del regulador y no debe considerarse como un mal funcionamiento del mismo.
Para un correcto funcionamiento se aconseja utilizar aire filtrado.